24/07/2019
EL cerebro podría ser como el Santo Grial de la ciencia. Muchos tratan de entenderlo, muchos tratan de replicarlo, muchos tratan de utilizarlo.
Muchos se interesan en saber cómo funcionan sus 86.000 millones de neuronas.
El 15 de julio, la empresa tecnológica Intel, famosa por sus chips, dio a conocer el sistema Pohoiki Beach, que sería capaz de imitar al cerebro humano. Equivale al cálculo de 8 millones de neuronas. Se trata de un total de 64 chips basados en los prototipos Loihi.
Al día siguiente, el multimillonario Elon Musk informó que su startup Neuralink está haciendo progresos en una interfaz que conecta el cerebro con computadores. Además de intentar llevar a seres humanos a Marte y de producir potentes autos eléctricos, Musk espera comenzar a probar en personas el año que viene esta simbiosis entre el cerebro y la Inteligencia Artificial.
En el caso de Intel, gracias a Pohoiki Beach, los investigadores podrán experimentar con el chip de investigación Loihi, cuyo diseño está inspirado en el cerebro humano. Este chip aplica los principios de los cerebros biológicos a las arquitecturas informáticas. Loihi permite a los usuarios procesar información de una manera hasta 1.000 veces más rápida y 10 mil veces más eficiente que los procesadores (las CPU) que se emplean en aplicaciones especializadas, como la codificación dispersa y la búsqueda de imágenes.
Pohoiki Beach representa un hito en la labor de investigación neuromórfica de Intel y sienta las bases para el objetivo marcado por el equipo de Intel Labs de aumentar la arquitectura hasta las 100 millones de neuronas hacia finales de este año.
“Estamos impresionados con los resultados iniciales que hemos obtenido a medida que escalamos Loihi para crear sistemas neuromórficos más potentes”, señaló Rich Uhlig, Director General de Intel Labs. “Pohoiki Beach estará disponible para más de sesenta socios de nuestro ecosistema, que emplearán este sistema especializado para resolver problemas complejos con elevados requisitos informáticos”.
La ingeniería neuromórfica se enfoca en imitar el comportamiento biológico.
Rich Uhlig presentó el sistema en la cumbre DARPA Electronics Resurgence Initiative (ERI) en Detroit. Según el MIT Technology Review, la agencia militar estadounidense está preocupada de que Estados Unidos pierda su liderazgo en chips en la medida que ya no se pueden aglutinar más transistores de la manera convencional. Por eso también se ha pensado en la computación cuántica.
DARPA es la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa (a la que debemos la Internet). El proyecto ERI (Iniciativa para el Resurgimiento Electrónico), de DARPA, comenzó en 2017 y tiene un financiamiento de 1.500 millones de dólares para cinco años.
Lo que quieren es que los soldados controlen las armas con el pensamiento. “Un mono ha sido capaz de controlar un computador”, dijo Elon Musk al final de su presentación de Neuralink.
En el diario “El País” se dieron cuenta de que todos apuntan a lo mismo. “La cirugía, los materiales, las conexiones internas son solo algunos retos que debe lograr resolver con éxito Elon Musk, y en los que hay otros proyectos en marcha, entre ellos algunos con inversión del Pentágono. El Departamento de Defensa pretende que sea posible controlar objetos ajenos al cuerpo con el cerebro”.
Un profesor de neurobiología afirma en el buen artículo de CNN Business que no ve mercado para algo como Neuralink. Es como si alguien dijera: “No veo en el futuro a ejecutivos andando en monopatines por las calles”.